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martes, 13 de febrero de 2018

Barcelona con Niños: Acuario de Barcelona

La verdad es que las dos veces que he ido a Barcelona hemos visitado el Acuario. Diría que es una parada obligatoria como psicópata de los animales del mar, y además estando tan cerca del Mediterraneo es complicado no acabar rodeado de agua de un modo u otro. El acuario de Barcelona además se encuentra en un sitio tan turístico y tan de paso que pilla a mano. Justa al final de las Ramblas y cerca de la zona comercial de Maremagnum, no tiene perdida.


El acuario de Barcelona es una visita para pasar un par de horas descubriendo misterios del fondo del mar. El túnel de tiburones mola bastante y la verdad es que hay especies muy entretenidas, eso si, en comparación con el precio de otros acuarios y la cantidad de cosas que se puede hacer a lo mejor resulta un poco caro. Mucho más si hablamos de una familia entera. Pero es que me encanta...

El oceanoario ( o el túnel de tiburones de 80 metros de largo) es de los más bonitos que he visto nunca, aunque los acuarios que recogen las especies de todos los mares del mundo son los mayores alicientes de L'Aquaàrium de Barcelona.  Además de sus  35 acuarios hay 11.000 ejemplares de 450 especies diferentes, ¡Casi nada!





Esta ocasión tuvimos la oportunidad de llegar a tiempo a una de las actividades infantiles. No son habituales y el aforo es muy limitado. Pero raudos y veloces fuimos a ver a la muchacha que vendía alimento para los Koi. Supongo que conocéis a los peces Koi o carpas. Son unos peces chinos super populares. La verdad es que la actividad podía haber sido mucho mejor si cabe si alguien nos hubiera explicado algo porque lo de dar de comer con biberón a los Koi mola pero saber cosas como que llegan a vivir 30 años, que son de los pocos peces que pueden llegar a reconocer a sus dueños o que son uno de os tatuajes más populares son esas cosas que te quedan marcadas.

Dar de comer a los koi es un deporte de riesgo porque son unos glotones y además los hay enormes. Pueden llegar a pesar hasta 8 kilos así que si uno de los gordos enganchaba la botella te quedabas sin ella y había que recuperarla. ¡Menuda pedazo de boca tienen esos bichos! Eso sí, aunque la verdad es que no era muy costosa la actividad (entre 2 y 3 euros) no era gratuita, que hemos leído que los talleres y actividades son gratis en el Acuario en otros blogs pero no es del todo cierto, sólo son los talleres que además tienen plazas muy limitadas y sólo se hacen en fin de semana, ahí dejo el dato.


Dirección: Moll d’Espanya del Port Vell , s/n 08039 – Barcelona. Lo encontrarás junto al mar, en el Port Vell. Cómo llegar al Aquàrium: Metro L3 o L4
Precios: General (20€) / Mayores de 65 años (18€)/ Menores de 2 años gratis.
Web:  https://www.aquariumbcn.com/

jueves, 8 de febrero de 2018

Oporto con niños: La librería más bonita del mundo, Lello

¿Sabes esos datos tan divertidos sobre las ciudades que te indican edificios antiguos, curiosos o destacados? Pues en nuestra ruta por Oporto hicimos parada de tres lugares emblemáticos que son considerados los más bonitos de su género. Todos tan diversos como una cafetería, una librería y un restaurante de comida rápida. Además dos de ellos han inspirado a J.K Rowling en la creación del universo Harry Potter. Si eres un fan del libro o simplemente no te quieres perder atracciones bonitas de la ciudad apunta estas direcciones en la agenda y no dejes de hacerles una visita.


Empezaremos por el punto más turístico de los tres. Situada en R. das Carmelitas 144 la Livraria Lello es uno de los puntos turísticos de la ciudad de Oporto. Se inauguró en 1869 y con su estilo modernista y su impresionante escalera y acabados en madera son los principales reclamos, ya muy por encima de las piezas literarias que esconden en su interior. Su popularidad ha crecido tanto en estos tiempos que ahor a para poder pasar es necesario adquirir una entrada de 4 euros por persona que luego te descuentan si quieres comprar algo en su interior. 

Aunque la librería es preciosa los visitantes van porque inspiró a J.K Rowling para describir la famosa escuela de magia de sus libros de Harry Potter. Y viendo los techos, esa escalera imperial de dos ramas y los colores es más que razonable. La buena mujer decidió mudarse a Oporto en sus años mozos y vivir allí dando clases de inglés para mantenerse. Por eso tanto este punto como la cafetería de la que os hablamos más adelante pueden presumir de ser la inspiración para uno de los escenarios de literatura juvenil más destacados de este siglo (bueno, del anterior también). 

La visita comienza en la tienda de al lado, justo en la esquina se compran los tickets y aunque se pueden comprar por internet (y ahorrar las colas) os aconsejamos que paséis por la tienda porque es una monada. Podéis dejar allí mochilas y bolsos para ir más cómodos y además sacar alguna foto gamberra en su andén 9 3/4 o comprar merchandising en forma de Funkos, libros o peluches entre muchas otras cosas. 

Dentro de la librería me ha encantado el carro de mina para transportar los libros y las estanterías infinitas, las escaleras que suben o acaban en ventanales. Y es que en sus dos plantas, y a pesar de la cantidad de gente que hay por allí siempre encuentras algo único y divertido. 

 Si no tenéis ideas de en qué gastar los 4 euros hay un libro infantil (no editado en español a pesar de que el 90% de los visitantes somos de aquí) que es una monada sobre la propia Librería y que vale 6,90 y se llama In the most beautiful Bookshop in the world: Lello. 

Narra la visita de un niño por al librería y sus secretos y cómo elige el libro perfecto para él. La verdad es que no se han herniado mucho en el título pero es un buen recuerdo que se puede encontrar en portugués, francés o inglés, así que al menos si los papis se defienden en alguno de esos idiomas te hace el apaño sin gastar mucho. 

Hay libros en español, pereo el precio está un poco alto y os sale mucho mejor comprarlos en casa incluso sin descuento.

 Las fotos salen muy monas y el ambiente es genial.  Eso sí, intenta evitar las horas puntas porque tiene unas colas que quitan el hipo. Nosotros fuimos un día entre semana pronto y no hubo problema. 

No cierran ningún día así que ... es cuestión de probar.

Más información: 
https://www.livrarialello.pt/

viernes, 2 de febrero de 2018

Oporto con niños: Sea Life y Serralves.

Hay una cosa genial de hacer viajes y dedicar más tiempo del que la gente normal decide dar a una ciudad. Es la idea de salirse de las rutas establecidas y hacer cosas fuera del programa habitual. Visitar cosas un poco más alejadas y disfrutar con los autóctonos de actividades fascinantes. Nosotros incluimos en ese día fuera de la ciudad dos paradas muy interesantes: El museo de arte moderno de Serralves y el Sea Life de Oporto. ¿Te animas a venir con nosotros?



Serralves es uno de los museos más interesantes de Oporto, su colección de arte moderno es inigualable pero además hay muchas cosas más de las que disfrutar en familia. Ala construcción es mastodóntica, se hizo siguiendo la moda art decó de los años 20 y no falta un detalle. Y en los años 80 se unió la finca y la casa con el museo de Arte moderno. Nosotros, a pesar de que eso del arte raro nos gusta decidimos dejarnos perder por los jardines. Y tanto que nos perdimos ¡¡Aquello resultó ser inmenso, grandísimo, eterno, kilómetros de finca, de jardines cada cual más curioso, grutas, estanques, e incluso pistas de tenis y zona de ganado. horas y horas puedes pasar por ese parque sin salir!!. Inmenso. 18 hectáreas. Y la verdad es que nos encantó, a los grandes y a los pequeños, para correr, mojarse y hacer el payaso, recorrer la villa atravesando paredes y espejos o simplemente saltando por las piedras intentando no acabar mojado hasta arriba. Por supuesto fracasé estrepitosamente.


Ubicación
Rua Don Joao de Castro, 210

Horario
Desde abril hasta septiembre: de martes a jueves de 10:00 a 19:00 horas.
Viernes, sábados, domingos y festivos: de 10:00 a 20:00 horas.
Desde octubre hasta marzo: de martes a viernes de 10:00 a 18:00.
Sábados, domingos y festivos: de 10:00 a 19:00 horas.
Cerrado todos los lunes, el 25 diciembre y el 1 enero.

Precio
Adulto: 10€ (entrada completa).
Jardines: 5€.
Tarjeta Porto Card, carnet joven y mayores de 65 años: 50% de descuento.
Menores de 18 años: entrada gratuita.
Primer domingo del mes de 10:00 a 13:00 horas entrada gratuita.


El camino a Serralves permite pasar por delante de la Casa de Música pero en realidad lo realmente divertido está al otro lado, siguiendo en dirección al Océano Atlántico.

En autobus acabas en el Castelo do Queijo allí playa y vistas maravillosas, mucha gente haciendo surf y justo a su vera el Sea Life, el acuario de Oporto, uno de los más kids friendly que hemos visitado.

El acuario se puede visitar en unas dos horas y conviene tener en cuenta los horarios de las charlas porque son una pasada, puedes ver como dan de comer a los tiburones o dar tú mismo de comer a las rayas. Pero no vamos a adelantar acontecimientos.

El edificio tiene dos plantas y cuando accedes pasas por una especie de puerta de ascensor donde tras un pequeño vídeo pasas a ver los acuarios. A parte de la increíble decoración de todas las zonas lo más curioso es que está a la altura de los más pequeños. Supongo que no os habéis dado cuenta pero vuestros padres seguro que si, o en su defecto sus riñones, para ver los animales normalmente hay que aupar criaturas. Pero en el caso del Sea Life no. Las actividades están a poca altura, todo se puede ver sin tener que levantarse y los paneles para jugar están incluso en el suelo. Además tienen una zona de piscina de contacto donde una chica muy maja me dejó tocar un erizo de mar. Entre barcos hundidos, cofres del tesoro y piscinas enormes llegamos a la primera parada, la más fascinante. El monitor habla en todos los idiomas del mundo y es super divertido. Nos presentó a todos los animales del acuario: los tiburones de punta negra, la tortuga Marisa,... El acuario además está decorado con ruinas y estatuas hundidas, con Poseidón vigilando los bichos. Despue´s de saberlo todo sobre los animales el chiquillo fue a dar de comer a los tiburones. Y allí se pudieron todos los bichos del acuario ciegos de comida. 


La otra actividad molona es con las rayas, las rayas son animales muy feos, y dan bocados muy gordos, son bastante agresivas, pero... ¡¡Puedes darle de comer!! Otra monitora explicó cosas sobre ellas y nos dio unos guantes de latex y un poco de carnaza, pescado y cosas de esas y nos acercamos a la piscina, a la de tres soltamos nuestros trozos de comida y pudimos ver cómo los devoraban.


En la tienda me compré un tiburón, es tradición, ya lo sabéis, y después nos quedamos en la cafetería, que tenía un precio muy razonable y en la zona de juegos a disfrutar un poco y descansar antes de dar un buen paseo.

Me encantan los acuarios, he visto muchos, pero sin duda por accesibilidad, actividades, y decoración el de Oporto ha sido sin duda uno de las que más me ha molado. Sea Life es una "cadena" y hay uno en España, concretamente en Benalmadena, la verdad es que estamos deseando ir a ver si mola tanto como su vecino luso. 

Ubicación: 
R. Particular Nº 1 Castelo do Queijo, 4100-379 Porto, Portugal

Horario: 
De 10 a 18 horas a diario y hasta las 19 horas los fines de semana. De lunes a domingo.

Precio: 
Entre 12 y 15 euros

La zona de Foz, donde se encuentran estas actividades es muy bonita, es genial pasear por la orilla del mar pero también soñar con encontrarnos con Iker Casillas que dicen que vive por aquí, no nos llamaron para tomar un café ni nada.

No hay derecho.

domingo, 14 de enero de 2018

Viaje a la prehistoria sin salir de Madrid: Arqueopinto


Hace poco en casa me pusieron una peli de un señor que era arqueólogo.

Iba por la vida escarbando y buscando tesoros. No, no es Tadeo Jones, era otro tío con gorro muy famoso porque cuando no hacía eso pilotaba el Halcón Milenario. Con tanta aventura y carrera y piedras redondas a punto de machacarle me perdí un poco lo que hacía de verdad. El colega era profesor de historia y arqueólogo. Se dedicaba a recomponer la historia del pasado con las cosas que encontraba enterradas o rescataba. Y eso es lo que os vamos a proponer hoy. Un viaje al pasado en familia para descubrir misterios, conocer a nuestros antepasados y vivir muchas aventuras a pocos minutos de la capital de Madrid, en Pinto: Se llama Arqueopinto y es una pasada.


Llevan currando mucho tiempo y a pesar de ser bastante conocidos a nivel de colegios las familias en general no sabemos de su existencia cuando en realidad es una actividad brutal para la mañana del fin de semana. Está situado en un parque y sus instalaciones son geniales. Es un gran ejemplo de cómo con poca cosa pero con mucho talento puedes hacer cosas extraordinarias. La visita a Arqueopinto es guiada. Tenéis que consultar bien los horarios y conviene hacer reserva para no quedaros fuera. Nosotros conocimos a dos de sus guías entre la visita y los talleres y los dos eran la mar de majos.

 Nuestra excursión al Paleolítico fue dirigida por Raúl, pero todos los miembros del staff son arqueólogos y saben perfectamente de lo que hablan. También conocimos a Ana en uno de los talleres y era la mar de simpática.

El recorrido se realiza por una serie de escenarios donde descubrimos a mis tatatatatatatatatarabuelos los homínidos que eran unos señores muy feos, muy pelados y con chepa que parecían monos. 

La visita es didáctica. Pero no como en muchas que es un no parar de datos, en esta aprendes un montón. Cómo a fabricar armas, usarlas o hacer fuego. Así que cada vez que avanzas en el tiempo y por las instalaciones vas conociendo los misterios de la vida de hace miles de años en la tierra. Paseas por la caza, las cabañas y las casas y los avances de la época hasta llegar a la agricultura y la ganadería de forma muy lógica y dentro de una cabaña del neolítico incluso aprendes a hacer fuego.

Pero después de la visita sigue la diversión.
Os recomendamos que consultéis la agenda de Arqueopinto y no os vayáis sin hacer al menos un taller.

Los talleres tienen como monitores a los propios arqueólogos y os enseñan un poco de cómo construir cosas como se hacían en la antigüedad con sus mismas herramientas o parte del trabajo del arqueólogo. 

Por ejemplo a decorar tu propia vasija Romana, a hacer un mosaico, hacer una lanza, instrumentos musicales antiguos... o a desenterrar descubrimientos de la arena tal y como lo haría un profesional. Algunos talleres son más complicados que otros así que podéis pedir consejo aunque también si tenéis niños inquietos o con gustos especiales seguro que se adaptan. Por ejemplo con un poco de ayuda el taller de excavación me gusto mucho más que el otro a pesar de ser para niños un poco más mayores.

Si podéis reservar los talleres también es recomendable para no quedaros sin plaza y que tengan todo el material listo, sobre todo si no hacéis la visita y llegáis solo al taller, esa opción también existe.

Además de realizar una labor educativa brutal en Arqueopinto hacen una labor social interesante a través de los Paleotrueques. 

 ¿Qué es un paleotrueque? Pues sencillo, puedes realizar alguna de sus actividades a cambio de algo, en función del día pueden ser juguetes, comida, ropa... y esta se donará a Caritas.

En ese caso la entrada al taller es gratis. Suelen ser los últimos talleres del día. Así que posible hacer el mismo día la visita y los dos talleres y llegar a comer a casa.

Si no llevas nada puedes abonar la entrada normal pero siempre es bonito colaborar. ¿Verdad?

Siempre hay alguna actividad de este tipo cada fin de semana. Así que si lo ves en la web ya sabes...

Consulta el programa aquí: http://arqueopinto.com/actividades-de-prehistoria-para-familias-en-madrid/

En enero se accede a cambio de leche líquida y en febrero a cambio de productos de higiene para el bebé (pañales, cremas, toallas, ...) y así lo van publicando en la web paa que lo tengáis en cuenta.
 
Una mañana en Arqueopinto es un planazo para el fin de semana, que además disfruta también los mayores, porque en este caso no está reñida la diversión de los peques con la de los más grandes.  Al contrario, algunos padres los pasaron casi mejor que sus hijos.


Nuestros consejos:
Siempre con reserva. Es fácil, por teléfono o en la web.
No dejéis pasar los talleres.
Recomendadísimo a partir de 3 años y más cuando estén estudiando la prehistoria.
No tengas miedo a preguntar y tocar, porque todo lo que hay se puede tocar, menos al guía que ese si puede morder.
Los talleres pueden hacerse sin hacer la visita así que si vuestro peque está estudiando el antiguo Egipto, por ejemplo, podéis reforzar con una de sus actividades la lección del cole.
Tienen para hacer cumpleaños. ¡¡¡Lo flipo!!
Las instalaciones están en exteriores, en invierno hay que abrigarse un poquito, hace fresquete. Pero los talleres se hacen en el interior.
 

domingo, 3 de septiembre de 2017

Terra Mítica, el parque ideal para ir en familia

Normalmente empezamos los post contando risueñamente lo bien que nos lo hemos pasado (o no) y añadiendo datos prácticos para  familias con niños canijos como yo. Pero en este caso vamos a hacer una excepción porque la verdad es que Terra Mítica es un parque que va con handicap y mi señora madre sabe de lo que habla.

Como veranea desde siempre cerca de Benidorm el año de su apertura allá que se fue toda la familia a comprobar las bondades del nuevo parque de atracciones. Y lo que allí había era más o menos un desierto desolado sin sombra y con un calor de mil demonios. Eso unido a que la forma del parque obliga a ir como una hormiguita hizo que además pasaran por unas colas importantes desde primera hora y muchas atracciones no funcionaban, así que si, como muchas de las que habéis comentado en los stories iba preparada para lo peor, gorras, crema de sol, botellas rellenables y bañador... Pero nada más lejos de lo que había hace 17 años, y es que a veces las cosas cambian. Y este es uno de esos casos. 

El verano de 2017 visitó otro parque, un parque que desde entonces ha pasado por varios dueños y muchas, muchísimas reformas (de hecho la antigua pirámide de Keops está en reforma ahora) .  

Han cambiado las atracciones y ha adecuado espacios para que las temperaturas no sean un problema. Han hecho un parque entero nuevo lleno de atracciones más acuáticas con una gran piscina y hay zonas con jacuzzis y juegos infantiles para refrescarse en muchas zonas del recorrido así que, si como mi señora madre sois de los que visitaron el parque hace más de una década, con espíritu de adolescente buscando atracciones brutas, pues os recomiendo darle una segunda oportunidad.  

A nosotros nos sorprendió mucho.

Al lío.

Terra Mítica es un parque de atracciones familiar situado entre Villajoyosa y Benidorm, se puede ver en la lejanía las letras en la montaña como si fuera un Hollywood levantino y asomar alguna de las atracciones que en su momento fueron emblema (no, la montaña rusa de madera no funciona desde hace años, no os llevéis un berrinche aunque siga ahí). Digo familiar porque exceptuando Sinkope, Tornado, Titánide, Inferno y el vuelo del fenix son las únicas que son para público adulto. El resto se pueden disfrutar desde los 92 centímetros con alguna rara excepción de 1,10 que las hacen válidas a partir de los 5-6 años.

Así que si, es un parque para familias, para que nos podamos montar en cosas "brutas" todos juntos y descansar en las infantiles que, por ciento, hay muchas.

El primer consejo es que empecéis alejándoos de la entrada, las colas se disipan a lo largo del día y las de primera hora se concentran en rigurosa cercanía a los accesos, es decir, las cataratas del Nilo están hasta arriba en la apertura pero a la hora de la comida todo está tranquilo y así permanece hasta el cierre. Así que a disfrutar.

El parque, bueno, los parques, se dividen en varias zonas "antiguas": Egipto, Grecia, Roma y Las islas. ¿Merece la pena comprar las entradas combinadas? La respuesta es SI.

Básicamente porque en verano las atracciones de agua se concentran en Iberia así que estar a remojo mola. Y eso responde la otra duda existencial, ¿Pasas calor? Pues las cosas como son, es que hace calor, pero las colas están a la sombra y hay difusores de agua e incluso un señor con una mochila echando líquido encima tuyo continuamente. 



Desde que montamos en la primera atracción (las cataratas) hasta la salida a las 10 de la noche estuvimos mojados así que no pasamos calor en exceso. Además han hecho varias zonas de agua (a parte de las atracciones de mojarse) nada más entrar en Egipto hay una laguna con juegos para los niños y jacuzzi para los grandes. ¡¡No dejéis de echar el bañador!!.  Además hay duchas en varias zonas, no sólo cerca de las cosas de agua, y la otra piscina es la gigantesca con jacuzzis y chorros por doquier, un oasis en condiciones para descansar de la adrenalina en Iberia.

Además de las atracciones tenemos que recomendar los espectáculos, pudimos ver pocos porque hay muchos y están previstos para que puedas verlos todos sin solaparse así que es necesario visitar el parque varias veces para poder disfrutarlos en su totalidad. Eso sí, elegimos bien y fueron extraordinarios. No dejéis de visitar el de Barbaroja en la zona de Iberia que es una aventura con piratas que lo mola todo y los nocturnos, tanto Cleopatra como el de cierra. Nos hablaron super bien de los romanos pero estábamos ocupados en la piscina flotando como nutrias y no llegamos, pero lo apuntamos para la próxima.

El catálogo de atracciones para la familia entera es amplio: Dos montañas acuáticas, un cine 4D, montañas rusas infantiles, rápidos, cazar minotauros, Infinnito para observar preciosas vistas sobre Benidorm, paseos en barco, coches de choque,... y las atracciones de niños son réplicas de las de mayores y no había nada de cola lo cual nos sorprendió un montón. Las tazas emulando el modo averno de papá girando la rueda son de las atracciones que más disfruté. Y hay un Cuca Park para los más pequeños que es una delicia.



Pasamos un día excelente de principio a fin, la comida es la típica de los parques pero no nos resultó cara (no se puede meter alimentos ni bebidas dentro) y la verdad es que nos tuvieron que echar casi de las atracciones porque no me quería ir.

El resumen  ha sido muy positivo, repetiremos seguro, eso sí, no todo son bondades y podemos poneros alguna pega. La hora de cierre del parque con respecto al resto de las atracciones está muy separado, acostumbrados a salir de las atracciones cuando cierran para ver los espectáculos finales en Terra Mítica casi hay una hora hasta el cierre final y además las tiendas y locales también están cerrados, yo apuraría un poco más los horarios de los cacharros o en su defecto adelantaría el último show.

Si tenemos que valorar el parque para familias entre 3 y 10 años la nota es muy positiva. Los niños se pueden montar en todas las zonas, no hay una zona infantil de la que no puedes salir, los padres se pueden montar con ellos, se come aceptable y encima hay spa. 

¡Un combo perfecto!

jueves, 24 de agosto de 2017

Un día en Mundomar Benidorm

MundoMar abrió allá por 1996 cuando mi señora madre era una adolescente. A pesar de ello siempre pensó que si hubiera sido un poco menor sería el parque de sus sueños. El año pasado celebraron su veinte aniversario haciendo felices a los niños, y ahora también a mi. ¡Yeah! Y es que como sabéis hay pocas cosas en el mundo que me gusten más que los peces, o los animales acuáticos, y sobre todo los tiburones que, aunque en MundoMar no hay,  tiene suficientes alicientes como para que eso no sea un problema para el mayor fan del mundo acuático del planeta. ¿Queréis saber como es MundoMar y lo que hay dentro? pues veniros conmigo que os lo enseño todo.

MundoMar no es un parque muy grande pero eso hace que sea manejable para un día con los más pequeños, que de eso se trata. Y no tiene nada que ver con un zoo o con el Oceanográfico, el concepto es muy diferente, es un parque que se basa en la interacción y en aprender sobre los animales, tocarles y conocerles. Por eso a partir de los 3 años es el parque más recomendable. 

La entrada a MundoMar está justo al lado de su hermano acuático Aqualandia, de hecho desde la zona del delfinario puedes ver algunas de sus instalaciones. En la ladera de una montaña convierte la visita en una interesante excursión y de cuestas. Eso sí, muy accesible con carros (aunque no tanto para las espaldas de los que los empujan). Además tiene muchas zonas de sombra y sistemas de aspersores de agua para no morir en el calor de Benidorm. Lo primero que os aconsejamos es que os hagáis con un plano y un horario porque la parte molona de MundoMar son los espectáculos y las interacciones. Lo hacen de forma que casi todas las alimentaciones e interacciones son en los trayectos a los espectáculos por lo que lo vas a tener fácil. 


Los tres shows son muy divertidos.
Hemos visto espectáculos con animales antes y casi todos tienen dos puntos en común: inculcar el respeto por el medio ambiente  los animales y son más aburridos que un capítulo de Peppa Pig. Peroooooo aquí la cosa cambia. Los espectáculos eran divertidos. Muy divertidos. En concreto el de los leones marinos era hilarante, aunque por ponerle una pega el inglés era un poco de aquella manera. Actores y animales enseñan cosas básicas sobre su anatomía, comportamiento y cómo ser mejores con el medio ambiente. El de los delfines tiene unas coreografías acuáticas con bailarinas que ya quisiera el Oceanográfico de Valencia, los delfines son sin duda la estrella de cualquier parque (a falta de tiburones, que ya sabéis que son mi debilidad) así que reconozco que además de verlos poder tocarlos ha sido la caña. Y para terminar el de las aves exóticas, que además está cubierto y refrigerado era muy curioso. No perdimos la oportunidad de descubrir los misterios de los tucanes, los loros y los bichos que volaron a escasos centímetros de nuestra cabezas para luego jugar un rato en el parque de aventura situado justo al lado con tirolinas y toboganes gigantes. 

 Las interacciones son un clásico, lo realmente increíble es que casi puedes conocer cualquier animal. Creo que pronto incluso con los pingüinos ¡¡Eso no me lo pierdo!! Casi todas suceden a la hora de la comida y se les puede alimentar o tocar brevemente. Por supuesto hay foto del momento. No os agobiéis, no es obligatorio comprarlas peor si os aconsejamos que pongáis en el presupuesto por lo mejor 20-30 euros para las fotos porque algunas son tan bonitas que no vais a poder remediarlo y necesitaréis comprarlas. Nosotros nos sacamos con los delfines, los loros y los lémures. Pero también podéis encontrar loris, leones marinos y diversas especies que estarán encantadas de conocer a los más pequeños. Sinceramente y a pesar de la reticencia inicial a pasar a las jaulas una vez superado el miedo me encantó tocar los bichos y saber que un delfín es suave y blandito o que los lémures son como gatos aunque tengan cara de malos. No tienen zona de "Toca toca" como en las granjas escuelas porque le volumen de visitantes es mucho más brutal pero eso ya sería la caña.


En cuanto a la comida  disponéis de numerosos lugares para comprar alimentos y bebida y también de zona de picnic así que no hay problema sea cual sea vuestra elección. 

Lo que más me gustó de todo, teniendo en cuenta que tengo cuatro años y un criterio dudoso, es sin duda lo de poder tocar bichos... y el parque, porque sinceramente, donde haya una buena tirolina allí soy feliz.


lunes, 7 de agosto de 2017

Aqualandia Benidorm con niños de menos de 1,20 de altura

Algunos me conocen saben que soy un tritón. Mitad niño cabezón, mitad pez. Un ser vivo que aprendió a nadar antes que a hablar y esas cosas marcan, las cosas como son. Desde muy canijo he ido a parques acuáticos y en casi todos nos hemos encontrado con un problemón gordo y es que al final te veías a los padres achicharrados detrás de las criaturas en la zona infantil. Así, en replay, hasta que los niños se convertían en pasas y los padres en gambas rojas achicharradas.


Algunos parques incluyen pequeños toboganes en catálogo para niños a partir de 3-4 años. Esos los usábamos con 2 años haciéndonos los locos gracias a que sabíamos nadar y además parezco más grande de lo que soy, pero aún así pasar un día entero en un parque acuático tirando de un triste tobogán puede aburrirme hasta a mí... pero de repente ha aparecido Aqualandia Benidorm, un parque que lleva en la vida de nuestra familia décadas, que mi señora madre e incluso mi señor abuelo disfrutaron hace muchos años y donde se jactan de haber probado por primera vez el kamikaze o un tobogán que no acababa en una piscina. Cosas de veranear toda la vida en la zona. Esta fue mi primera visita y la primera de mi madre en muchos, muchos años y tuvimos que aguantar historias de abuela cebolletas sobre la zona Junior que sigue igual y los muchos cambios del resto del parque. Pero el veredicto no puede ser más positivo. Si tenéis niños nadadores y kamikazes os vamos a contar como disfrutar de Aqualandia y las atracciones para menos de 1,20 para disfrutar en familia. ¡Que son un montón!


Lo más flojito: géiser y adventureland. Además son las primeras que os vais a encontrar en el acceso al parque. El géiser es una pequeña piscina con cascadas y aventureland es un parque acuático en miniatura con pista blanda, varios toboganes disfrutables con y sin flotador, un pequeño parque de bolas, pistolas de agua... también es la parte más superpoblada del parque pero la más divertida para niños de 3-4 años estándar. Os recordamos que nosotros no somos estándar así que sigamos el paseo.

La siguiente parada es la Laguna. La zona infantil es muy infantil, toboganes más pequeños y elementos de flotación bastante entretenidos. La verdad es que estuvo curiosa, pero lo que mola es que roza con la zona de niños más grandes. Las restricciones de la zona de aventura son saber nadar y tener el valor de usarlas. Yo ahí reconozco que estuve un poco cagueta porque eso de saltar desde la altura o que el tobogán acabe a metros del agua... pero estoy seguro que el año que viene me animo.


¿Te vienes de spa? Justo al lado de la zona aventura de la Laguna hay un mini spa y a pocos metros Niagara, una piscina enorme con cascadas y el spa grande lleno de chorros para relajarte un poco. 

Siguiendo la zona tranquila tienes la piscina de olas y el río Amazonas donde puedes dar vueltas con tu flotador o dejándote llevar. 

¿Demasiado tranquilo? Pues apunta porque vienen curvas.


El minizigzag es una opción para los niños que pueden nadar o tirarse acompañado por un adulto. No dan mucha impresión, son bastante suaves y relajados... por eso existe el número 5 en el ZigZag de mayores. Presta atención pues lleva una cola diferente antes de acceder a la zona de escaleras. No tiene restricción de estatura y se puede usar con un adulto... ¡y lo mola todo! Un tobogán mediano con curvas y velocidad que ha hecho las delicias de mi persona y de mi señora madre al poder montarse conmigo en algo y no esperarme estoicamente... como fue un éxito pasamos al paso dos... 

Una publicación compartida de Bebé Friki (@bebefriki) el

El black Hole. Muchos parques tienen  Black Holes pero en pocos dejan montarse a los más peques. Y es una pena porque mola mucho. Es un tobogán tapado de color negro con neones de color en el techo. Se tira uno con un flotador doble y los pequeños pueden ir incluso con elementos de flotación externos. Los socorrieras te ayudan y te colocan  de la forma más segura para disfrutar el viaje... ¡y menudo viaje! Caídas y curvas en la oscuridad. Súper divertido. De hecho si me preguntas el que más me moló de todas las atracciones.


Así que si te preguntas si merece la pena ir a un parque acuático con un niño pequeño te diré textualmente que estudies las atracciones por adelantado, muchos ya son conscientes de que el público familiar es un porcentaje muy amplio y su oferta es de lo más variado para que gusten desde bien pequeños. 

Además tiene amplias zonas de picnic y la comida a un precio bastante razonable para ser un parque temático. Pasamos un día de lo más agradable, con decir que nos tuvieron que echar del parque y fue montar en el coche y caer redondo os hacéis una idea.



miércoles, 7 de septiembre de 2016

Recogiendo frutos rojos con Rural It en Lozoya


Vuelta al cole y aunque tenemos pendiente hablar de un montón de cosas de este verano vais a permitidnos que alternemos con la rabiosa actualidad porque si no esto "caduca" porque es fruta de temporada... Literalmente.

Al regreso de las vacaciones mi señora madre con nocturnidad y alevosía levantó el whatsapp (que ahora es lo que era antes el teléfono) para conseguir un plan decente el fin de semana y no acabar encerrados en casa subiéndonos por las paredes muertos de calor gracias a las olas esas del infierno que hacen que este septiembre sea el peor que se recuerda en décadas. Al otro lado estaba Cookita que tardó medio minuto en escupir un planazo de Rural It. A pesar de que las expectativas eran bajas , porque estoy especialmente destructor y la idea de un plan bucólico no acababa de resultar realista, decidió fiarse de la reina de las galletas y dejarse llevar por su Dieta de la Felicidad y su karma slow life que a día de hoy nunca ha estado en su apretada agenda y con las mismas quedamos todos los canijos para hacer una excursión que prometía ser cuanto menos interesante.


El plan era acudir a una parcela de recolección de frutos rojos en la localidad de Lozoya. Así que aprovechando que vivimos en el fin del universo y que las ganas de cachondeo eran grandes decidieron que era una buena idea meter a tres niños en la parte de atrás de un vehículo. El primer obstáculo fue la logística tipo Tetris que cayó sobre Tamara, que tiene, como sabéis, un master del universo en meter muchas cosas en poco espacio. Milagrosamente consiguieron cerrar la puerta y nos embarcamos en un viaje lleno de cosquillas, guantazos y Pablo Alborán.

Al llegar a Lozoya las adultas murieron de amor. Sus calles, sus casas, y se pusieron hasta arriba en una tasca local recomendada por un autóctono mientras los peques disfrutaban de los tesoros que salieron de esas bolas sorpresa del bar. Y después de llenar los estómagos continuamos con un paseo que acabó en batalla naval en la fuente de los cuatro caños del pueblo. Posiblemente yo me llevé la peor parte acuática aunque Mini Cookito se llevó el cosco con conmoción cerebral de rigor.



Después bajamos al lago donde seguimos un poco el guarreo que finiquitaron llevándonos a un chiringuito hippie donde construimos una montaña de piedras en el arenero en gallumbos como personas poco decentes que somos.



A pesar de estar super a gusto las mamis decidieron que el objetivo de la excursión seguía siendo ir a coger frutos rojos - aunque sabemos que si no llegan a haber pagado por adelantado seguro que no les sacan del chiringuito - nos desplazamos a El Puente del Molino donde armados con una caja de cartón aprendimos a recoger frutitas y degustarlas a dos carrillos.La pequeña finca justo al borde del lago posee dos hectáreas preparadas para recolectar arándanos, frambuesas, grosellas, moras...



Allí aprendimos mucho y perfeccionamos técnica. Ir con Tamara es un plus porque nadie sabía que las grosellas se cogen por racimos,  o que los arandanos tienen que ser super morados, que las fambuesas cuando tiran a oscuro son más dulces,... Eso y muchas otras cosas como que hay grosellas blancas y Frambuesas tirando a amarillo que están muy ricas.



Los peques pudimos acceder y recolectar los frutos, y no os vamos a engañar, también nos comimos alguno. Somos unos zampabollos de impresión. Y siendo destructores natos aprendimos, comimos sano y encima lo pasamos en grande por lo que no podemos poner pegas a este plan... Bueno, que sólo fuera un día porque lo pasamos super bien y queremos repetir ya. Somos unos ansias y eso de salir los fines de semana nos mola cantidad.
 
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