El término "trampantojo" proviene del español y se refiere a una técnica artística que utiliza ilusiones ópticas para engañar al espectador y crear la apariencia de objetos tridimensionales en una superficie bidimensional. Estas obras a menudo desafían las expectativas al jugar con la perspectiva, la sombra y la luz, logrando efectos sorprendentes que pueden confundir y asombrar.

Los trampantojos tienen raíces profundas en la historia del arte, remontándose a la época del Renacimiento. Artistas como Andrea Mantegna y Giotto di Bondone exploraron técnicas que sugerían profundidad en sus pinturas, sentando las bases para la evolución de esta forma de arte. Sin embargo, fue durante el Barroco y el Siglo de Oro español cuando los trampantojos alcanzaron su apogeo, con artistas como Juan Sánchez Cotán creando naturalezas muertas que parecían saltar de la tela.

Perspectiva Forzada: Esta técnica implica pintar de manera que los objetos parezcan estar más lejos o más cerca de lo que realmente están, creando la ilusión de profundidad.

Sombreado y Luces: Maestros del trampantojo utilizan sombras y luces para simular la realidad, dando la impresión de que los objetos están tridimensionalmente modelados.

Integración de Objetos Reales: Al incorporar elementos reales en la obra, como marcos de ventanas o estantes, los artistas pueden hacer que la ilusión sea aún más convincente. Recuerda, en muchas partes del museo el objeto real eres tú pero en otras hay atrezzo para hacer la foto aún más divertida.