El fútbol es más que un deporte en España; es una pasión que une a generaciones enteras. Si planeas un viaje en familia a Madrid y desean explorar la fascinante historia del fútbol español, no puedes dejar de visitar el Museo de la Selección de España, ubicado en Las Rozas, a las afueras de la capital. Este museo es un lugar imperdible para los amantes del deporte, y en especial, para aquellos que sienten un profundo cariño por la selección española de fútbol. Te guiaremos a través de los aspectos más destacados del museo y te daré algunos consejos útiles para aprovechar al máximo tu visita en familia. ¿Te vienes?

Es un recorrido que logra unir a figuras legendarias como Ricardo Zamora con Iker Casillas, Luis Suárez con Iniesta y Olga Carmona, y Alfredo Di Stefano con Fernando Torres o Aitana Bonmatí.

Inaugurado por el entonces príncipe y actual Rey Felipe VI el 24 de mayo de 2010, el museo va más allá de los logros de las selecciones absolutas, que incluyen tres Eurocopas, la Nations League y dos Copas del Mundo (Sudáfrica y Nueva Zelanda). También ofrece una inmersión en los éxitos de la Sub-21, la selección olímpica, los equipos de fútbol sala y las selecciones de fútbol playa.

1. La Copa del Mundo de 2010 y las Eurocopas 2008 y 2012: Sin duda, uno de los momentos más emblemáticos en la historia del fútbol español fue la victoria en la Copa del Mundo de 2010 en Sudáfrica. El trofeo y los recuerdos de esta histórica victoria se exhiben con gran orgullo en el museo.

2. Camisetas Históricas: Podrás ver las camisetas usadas por leyendas del fútbol español, como Xavi Hernández, Iker Casillas, Fernando Torres y muchos otros. Estas camisetas son un testimonio de los momentos memorables que han marcado la historia del fútbol español.

3. Trofeos y Medallas: El museo alberga una impresionante colección de trofeos y medallas ganadas por la selección española a lo largo de los años, incluyendo la Eurocopa, la copa del mundo y otros campeonatos internacionales tanto de la selección masculina como de la femenina y, por supuesto otras disciplinas como futbol sala.

4. La copa que rompió Sergio Ramos: El trofeo de la Copa del Rey vivió un inusual y curioso incidente cuando Sergio Ramos, en medio de la celebración, lo dejó caer desde el techo del autobús que recorría la Castellana el 20 de abril de 2011. La copa sufrió daños considerables al caer al pavimento y ser arrastrada por el vehículo.

El Real Madrid había conquistado su decimoctavo título de la Copa del Rey al vencer al Barcelona en Valencia (1-0) en un emocionante partido que se definió en la prórroga con un gol de Cristiano Ronaldo. La copa en cuestión mide 78 centímetros, pesa alrededor de nueve kilos y cuenta con el escudo de la Casa de Su Majestad el Rey en plata con baño de oro.

Después de la accidentada caída de la copa, una nueva Copa del Rey fue expuesta en el "Tour del Bernabéu", y Sergio Ramos bromeó sobre el incidente en las redes sociales. El propietario de la joyería que fabrica el trofeo mencionó que siempre tienen un "plan B" para estos casos, lo que implica crear una réplica exacta.

Pero si quieres ver la copa accidentada debes visitar el Museo de la Selección donde, al final del recorrido está expuesta en una vitrina. La exposición de la copa dañada en el Museo de la RFEF generó cierta controversia. El Real Madrid no esperaba que la copa dañada se exhibiera en un museo, comparando la situación con las botas y las camisetas rotas que no suelen ser expuestas. Por otro lado, el creador del centro expositivo argumenta que la copa dañada es una pieza de museo que despierta la curiosidad de los visitantes y no tiene un valor negativo, de hecho estamos de acuerdo que fue uno de los objetos que más nos llamó la atención.

5. Objetos maravillosos: Una rica colección de recuerdos históricos, como camisetas legendarias, balones, y otros objetos relacionados con el fútbol internacional. Entre los tesoros se encuentra el balón oficial de la primera final de un Mundial en 1930, la camiseta original de Olivella de la Eurocopa de 1964, y la medalla olímpica ganada en Barcelona '92. También se exhiben objetos relacionados con eventos destacados, como el Mundial de 1982 organizado por España o el coche de Di Stefano. También es destacable la colección de futbolines 

Consejo. Antes de salir date un paseo por su tienda Outlet, puedes encontrar joyitas a muy buen precio. 

Datos de interés

Horario
Visita público general:
Martes a viernes, de 10:30 a 14:00 y de 15:30 a 18:30 h.
Sábado, de 12:00 a 14:00 y de 15:30 a 18:30 h.
Visita guiada (previa reserva y confirmación y siempre que haya un mínimo de 20 persona):
Sábado, de 10:30 a 12:00

Precios
TARIFAS INDIVIDUALES
Entrada Adulto 10,00 €
Entrada Adulto (mayor de 65 años) 6,00 €
Entrada Niño (5 - 14 años) 6,00 €
Entrada Niño (0 - 4 años) GRATIS
Adulto (Familia Numerosa) 9,00 €
Niño (Familia Numerosa) 5,00 €

TARIFAS GRUPOS (mínimo 20 personas)*
Entrada Museo Adulto. Visita no guiada 8,00 €
Entrada Museo Niño. Visita no guiada 5,00 €
Entrada Museo Adulto. Visita guiada 10,00 €
Entrada Museo Niño. Visita guiada 6,00 €
Entrada Adultos. Museo + instalaciones. Visita guiada 12,00 €
Entrada Niños. Museo + instalaciones. Visita guiada 7,00 €

La visita guiada a las instalaciones incluye en su recorrido: Campos de fútbol
Pabellón Deportivo
Vestuario Selección Absoluta

Duración aproximada:
Visita al Museo de la Selección Española de Fútbol: 1 hora.
Visita al Museo Museo + instalaciones: 1,45 horas (esta es solo posible guiada)

Dirección: 

Plaza Luis Aragonés s/n
Las Rozas (Madrid)

Más info: Museo de la Selección Española | www.rfef.es

 ¿Preparados para pasar un Halloween de miedo? La capital madrileña es un lugar excelente para dejar que los monstruos y las brujas nos aterroricen. 

1. Free Tour de Fantasmas y leyendas de Civitatis

Empecemos por una visita al anochecer a Madrid. Un Madrid plagado de fantasmas de todas las épocas, apariciones en espejos, muertos buscando venganza... Las calles de la capital lo tienen toso y para descubrirlo nada mejor que un Free Tour. Los Free Tour son experiencias guiadas donde se paga sólo lo que consideres que vale la visita. Si te gusta mucho darás más y si no darás menos. Por eso son planes muy económicos y justos. La visita de Tour de fantasmas sale de la Plaza Luna por la tarde (en torno a las 19.30 pero podéis consultar horarios. La ruta dura 2 horas y es recomendada para toda la familia, no da muchísimo miedo. Se anda bastante, el recorrido llega a la plaza de Cibeles para conocer los misterios del Palacio de Linares.  

Aunque es ideal para Halloween es un tour que ofrecen todo el año, por si queréis apuntarlo para más adelante. Lo que sí es recomendable es que reservéis cuanto antes porque en estas épocas se llena a tope. Podéis hacerlo en el banner o en este link. 

2. Horror Fest de Autocine de Madrid

Sabéis que es un plan que nos encanta porque siempre tienen animaciones específicas y porque es una apuesta segura. El autocine de Madrid abre sus puertas de nuevo con el Horror Fest donde programan varias películas de terror, algunas pueden disfrutarlas también los peques. En la programación de este año tenéis por ejemplo Pesadilla antes de navidad o La novia cadáver. Consulta la cartelera completa aquí: Cartelera Autocines | Entradas, sesiones y horarios

3. La estación "Fantasma" de Chamberí

Este es otro de esos planes gratis que puedes disfrutar todo el año pero que apetece en Halloween. Muchos la llamaban la estación fantasma porque cuando cerró sus puertas en los años sesenta se quedó en un limbo. Los mendigos invadieron sus andenes y sus sombras al paso del tren daban esa sensación de angustia entre los pobres viajeros. Pero la estación de Chamberí, que forma parte del proyecto museístico de Madrid, es un lugar mágico. 

Se visita de forma guiada con una explicación de unos 45 minutos donde aprendes muchísimo de la historia del metro pero también de las costumbres de los madrileños de otras épocas. Es un viaje en el tiempo que además es gratis aunque es necesario reservar con antelación en su web: Estación de Chamberí – Museos del Metro de Madrid (museosmetromadrid.es)

4. El museo de cera

Siempre es un clásico pero este año aún más porque llevaron a cabo una renovación y han reformado su zona de los horrores con nuevas figuras y nueva tematización. Es el momento ideal para descubrir uno de os museos de Madrid que más encanto tienen para los niños y no tan niños. Preparad las cámaras para sacaros selfies con las figuras más importantes de todos los tiempos. la entrada de adulto sale por 18 € y los niños por 14€.

5. El Laberinto de Tim Burton

Un laberinto con más de 300 caminos posibles que te mete de lleno dentro de la cabeza de este gran creador. ¿Se te ocurre un plan mejor?

Horario de jueves a domingo, de 10:30h. a 13:30h. y de 17:00h. a 20:30h, con pases cada 30 minutos. Paseo de las Delicias, 61

6. Centros comerciales. 

Y como parece que va a llover... ¿Un taller o una experiencia en un centro comercial? Nosotros tenemos el programa de los que nos pillan más cerca. Pintacaras, talleres, minipasajes del terror, tematización... Todo esto y más en casi todos los centros de la comunidad de Madrid. Consulta el programa del tuyo en redes sociales o en sus webs. ¿Nuestros consejos? Cuadernillos de Alcalá tiene un programa genial, suelen ser muy divertidas las propuestas de H2O en Rivas... pero seguro que hay miles de planes que te pueden atrapar cerca de tu hogar.

¡FELIZ HALLOWEEN!

 Vamos a ser honestos, Málaga merece, por lo menos, tres jornadas enteras pero a veces por cuestiones logísticas no se puede hacer más que una pequeña escapada como es nuestro caso. Por eso decidimos poner manos a l sobra y pasar un día disfrutando de sus monumentos y museos. Málaga es una maravilla y lo único que conseguimos es crear más necesidad de regresar y ampliar la visita como se merece. ¿Queréis saber qué visitamos o cómo lo pasamos? Pues sigue leyendo y te lo contamos todo.

La Alcazaba

Teníamos claro que para un sólo día ver a alcazaba y el castillo era quizás una tarea un poco titánica así que decidimos limitarnos a la Alcazaba que es considerada una de las más bellas de España. Y merece la pena. Esta fortificación construida sobre un emplazamiento fenicio y que se construyó entre el siglo X hasta el XV es un recorrido ideal para los más pequeños porque pueden disfrutar recorriendo las murallas pero también de enclaves preciosos y jardines deslumbrantes como El patio de los naranjos, el patio de la alberca o el de surtidores. Los palacios se conservan en muy buen estado y sus dimensiones lo hacen muy abordable para niños más pequeños. 

Es una Alhambra en versión muy reducida, para que nos hagamos a la idea. Recuerda llevar agua si vas en épocas de verano y no abandones el recinto sin sentarte un rato a admirar el precioso teatro romano que se encuentra junto a las taquillas de entrada. 

La Catedral

Existe la posibilidad también de subir a los techos para tener una visión más completa de la ciudad desde la altura. 

Museo Picasso

Nos parecía una decisión inteligente incluir alguna actividad dedicada a Picasso porque el el colegio habían dado unas sutiles ponderadas sobre uno de los artistas más conocidos de nuestro país. Picasso, estandarte del cubismo y creador de obras de renombre internacional tiene varios lugares visitables en la ciudad. Dudamos entre la casa natal y el uso pero finalmente decidimos acudir a este último y centrarnos en su aspecto más artístico y creo que fue un acierto. Muy cerca de la catedral el museo de Picasso se encuentra en el palacio de Buenavista con dos pisos y que recoge la exposición permanente con Las señoritas de Avignon dando la bienvenida al visitante. Este cuadro se encuentra en el MOMA de Nueva York así que al acercarnos nos damos cuenta del sutil engaño al tratarse de un tapiz inspirado por la obra y no un cuadro de Picasso. 

No voy a negar que la colección de obras es bastante completa pero que se me queda un poco corta tras haber visitado los museos de Barcelona y Paris del mismo artista. Es obvio que si no puedes ir a estos es una opción muy digna y que se complementa con exposiciones temporales que complementan la visión peculiar de Pablo Picasso. 

Un paseo por la ciudad y las playas. 

Como mencionamos no llegamos en época de baño pero un paseo por la zona del puerto con los cruceros llegando y un paseo por las calles del centro rodeando la catedral eran necesarias. Nos llamó la atención la cantidad y calidad de los parques de Málaga. De una belleza y desnivel peculiares y donde disfrutamos de sus sombras. Y, cómo no, nos asomamos a su playa más mítica, la Malagueta, en un día de mar picada que hizo que fuera una experiencia diferente. 

Nos dejamos en el tintero el Centro Pompidou, el Castillo de Gibralfaro y un sin fin de pequeños lugares por descubrir pero la impresión de la ciudad fue tan buena que prometemos volver y reparar ese agravio pronto.  

¿Qué nos recomiendas para la próxima escapada? 

¿Cuáles son tus imprescindibles? 

 Una de las paradas que siempre os recomendamos en la visita a Villajoyosa es el Villa Museo, un entorno maravilloso donde disfrutar de la riqueza arqueológica de La Vila desde tiempos inmemoriales. Su exposición fija es una maravilla y recorre los hallazgos íberos y romanos hasta la época modernista. Pero otro de sus alicientes son las exposiciones temporales que suelen durar 3-4 años y están pensadas al detalle. Acaban de despedir Esclavos de la belleza para dar la bienvenida a Música, Pólvora y Desembargo, un homenaje a los festejos de Villajoyosa y a su fiesta grande, Moros y Cristianos que se celebra del 24 al 31 de julio cada año (salvo excepciones que relatan en la exposición y pandemias mundiales)

Esta fiesta declara de interés turístico internacional desde 2003 es la más vistosa y espectacular de la zona. Y es increíble por la cantidad y calidad de festejos. Desfiles interminables, representaciones de la toma del castillo y la reconquista. Trabucazos y fiesta se mezclan es una semana donde los protagonistas son los viveros que defendieron nuestro, con la ayuda de Santa Marta el pueblo de la inversión morisca y que celebran con salvas, vítores, fuegos artificiales y paellas. Si tenéis la oportunidad idas de vivirla en persona es súper recomendable pero si no podéis hacerlo de una forma muy especial en la segunda planta del museo.

La exposición con un gran componente audiovisual tiene varias partes de audiovisuales, comenzando con una película donde cuentan el asedio y victoria de los vileros. Es la antesala de la parte más espectacular de la exposición dedicada a mapas, reliquias y aventuras de Santa Marta que fue rescatada en varias ocasiones y protegida por las familias de las desgracias a lo largo del tiempo. Esto hace que el visitante se haga a la idea de la devoción por la virgen de este pueblo de pescadores donde hasta las mujeres sacaron las piedras más grandes para su defensa.

Después de la lección de historia podemos entrar de lleno en las fiestas con montajes que nos llevan por todas las peñas que participan en las compañías, trajes de las compañías, canciones e incluso colarse en el interior de la fiesta viendo una caseta por dentro… pero en estos años que no ha habido fiestas lo más emocionante viene de la mano de las imágenes de los desfiles y, sobre todo, del montaje a tres pantallas del desembarco que se encuentra en la réplica del castillo. En esta parte el visitante puede ver un poco más de cerca la fiesta, tanto, tanto que se emocionará.

La visita posee carteles explicativos para poder entender y comprender cada parte de las fiestas. Una de las cosas que más nos gusta de este museo es que lo paneles suelen ser concisos, con anécdotas y bastante sencillos de leer lo que hace que quieras seguir la explicación. Para el visitante que no conoce las fiestas es sencillo entenderlas y seguir la explicación y hay suficientes datos lúdicos para que no sea pesada. 

En la parte más interactiva puedes tocar uno de los tambores que desfilan, ver el ambiente dentro de una de las compañías, coger uno de los famosos trabucos en tus manos o subir a un modelo del barco del desembarco. 

La visita acaba en una curiosa exposición de fotos. Para los que no han conocido las fiestas antaño los fotógrafos e la región pasaban por el pueblo fotografiando a los festeros. 

Al día siguiente en locales o en la propia playa se colgaban las fotos en cuerdas con pinzas. Había que ser el más rápido porque sólo había una impresión de cada foto y si alguien la cogía antes que tú te quedabas sin el recuerdo. esta parte que recoge fotos e todos los tiempos se ha hecho gracias a las donaciones particulares de todos aquellos que año tras año salían corriendo a ver als fotos del día anterior y se dejaban "las pesetas" para comprarlas. Para mí también es una de las partes más emotivas después de dos años sin verles disfrutar.