Hay millones de maneras de reconocer el móvil de una madre. Así a simple vista, sin tener que hacer un análisis y sin necesidad de ver a sus propietarias. ¿Sabríais localizar el móvil de una madre entre un grupo de, pongamos, diez dispositivos al azar? 


Os doy pistas para saberlo:

1. Llevan siempre un protector de pantalla. El protector de pantalla suele estar totalmente roñoso y roto debido a los despistes de la madre en cuestión o las ganas de cogerlo del niño.

2. La roña. Un móvil estándar de una madre tiene roña, la capa de grasilla de la pantalla suele tener un grosor por encima de la media y a veces sustancias no identificables que suelen ser restos de alimentos que han do de la boca al dedo y del dedo al móvil cada vez que cae en manos de su hijo.

3. Fondo de pantalla. Siempre que se puede la madre pondrá una foto suya con su pequeño en el fondo de pantalla o la foto de la sesión de fotos que contrató y amortiza al 100% reglando merchadising oficial de su criatura.

4. Carcasas personalizadas. Preferiblemente tipo libro para aumentar la vida útil del móvil por rotura en unos cuantos meses. Suelen tener una foto de su hijo de actualidad relativa, que cambian cada vez que el móvil antiguo casca.

Sin duda el colectivo de las madres es el que más emplean los servicios de personalización de objetos. Desde las cosas de los niños para el ocle hasta las suyas propias para gritar al mundo lo guay que es ser mamá, o para convencerse a si mismas de ello.

No os voy a engañar. Hace unas semanas cascó el móvil de mamá. Después de la pataleta inicial y la crisis de "se acaba el mundo" consiguiente procedió a reemplazar tenazmente todo su equipo de madre movilizada con los accesorios razonables de un móvil estándar con su pantalla que no ha durado intacta ni una semana y encargando una carcasa. Personalizar una carcasa para tu Sony, que es su caso,  para cualquier otro dispositivo del mercado es super fácil, sólo hay que revisar las 50.000 fotos que tiraste desde que cambiaste de móvil y seleccionar una, o unas cuantas y crear una preciosa composición que, si Dios quiere y nadie lo remedia, durará hasta que cambies de móvil. Que para los que sois un poco más torpes no cunda el pánico, es super sencillo de diseñar en Mi Carcasa Personalizada y lo haces en un suspiro con un collage tuyo, una foto, un texto o usando una plantilla la mar de mona y de forma intuitiva y además tienen un precio de lo más razonable. Y en dos días lo tienes en casa, eso sí, si eres madre esos dos días lo vas a pasar muy mal. El resultado es una carcasa preciosa con un aspecto fabuloso, la nuestra es rígida que adapta perfectamente y tras una semana de uso no se ha deteriorado la imagen para nada.La espera ha merecido la pena y espero de verdad que la carcasa nos acompañe muchos años porque eso significa que es buena pero lo más importante... ¡Que el móvil sigue vivo!