Tener una casa friki es muy, pero que muy complicado. Muchos muñecos, libros, estanterías, DVD y blurays. Y claro, integrar eso en un mundo IKEA es difícil, pero poco a poco y gracias a esas tiendas que nos hacen la vida más fácil, esas que te dejan diseñar a tu gusto o te ponen los dientes largos con creaciones japos o montajes frikis... pues no te puedes oponer. En casa son pequeños detalles... cuadros, cojines,sabanas... bueno, bien visto de pequeños nada. Está muy claro. Pero en el coche... ahí el coche.

El coche de mi madre es el lugar más surrealista del mundo. Ahora mismo acaba de quitar una preciosa réplica de las cuevas de Altamira realizada a bajo relieve a boli en la parte de atrás del vehículo. La verdad es que no entiendo por qué tanto esfuerzo cuando me quedo tan sumamente. Une pero las madre son un poco raras. De repente me encaramó bolígrafo en mano pintando el techo por el retrovisor y me calzó un grito que debieron escuchar hasta en Cuenca. Así que de momento el coche es territorio catastrófico lleno de peluches y juguetes, escondites donde se pueden ver galletas y botellas de agua para casos de necesidad y cosas por el estilo.


No entiendo por qué se mosquea por eso, en caso de holocausto podríamos sobrevivir semanas comiendo sobras del suelo y con los posos de las botellas de debajo del asiento. Es una cuestión de supervivencia del más fuerte, en este caso, yo.

Pero con el calorcete, los viajes y el inminente verano y decidió evacuar todo del vehículo y tunearlo para las frikivacaciones. Y pensaréis que eso no es tan fácil pero por algún motivo ella tiene diseñado un súper plan que me resulta inquietantemente perfecto y ultra decorativo.

Lo primero que mi madre se ha agenciado es la manta de verano más bonita del mundo mundial. La manta es el objeto más útil que puede tener uno en un coche porque está comprobado científicamente que el número de constipados que se cogen en verano por los aires acondicionados son evitables poniendo capas de ropa si te quedas sopa.Y es que siempre hay alguien que necesita que el aire esté como para hacer un iglú y acabas pillando la madre de todos los resfriados.


Además las mantas son muy útiles para hacer de abuelitas en los cines de verano y d e paso que no te acribillen los mosquitos las patorras, porque si, venden repelente pero ya os digo yo que eso no funciona en mi caso. Así que este año veremos las películas tapaditos con el bueno, el malo y el wookie y seremos los más frikis del cine y los menos resfriados.

La manta es de frikinow y no me podéis negar que es amor del bueno. Es finita pero muy resultona. Por aquí ni madre está súper orgullosa y dice que le va a dar un uso brutal porque a veces las cosas en el sitio adecuado son vitales.

Además está en camino la pegatina de vehículo definitiva by Palomino. Entre Madre Friki y manta friki seremos el vehículo mejor tuneado de la galaxia.

Amiguitos, prepárense para el verano que no solo de toallas vive el hombre... y de paso compraros un puff del amor que nosotros nos hemos quedado con el antojo, eso sí, la taza del blog ha caído, que éramos los únicos que vivíamos sin este complemento bloguero básico.